Bora Bora… Dos palabritas que te ponen a soñar con el paraíso que son Las Islas de Tahiti. Bora Bora es una de las islas más famosas del mundo, pero también una de las más bellas… Al planificar un viaje a Bora Bora, los visitantes suelen tener en mente un destino romántico. ¿Quién no ha soñado con organizar su luna de miel en la Polinesia Francesa, y especialmente en Bora Bora? Quienes visiten la isla quedarán gratamente sorprendidos por las vacaciones que les esperan y se asombrarán al ver que no es solo para recién casados.
Entre las aguas turquesas de la isla, los fondos marinos, los jardines de coral y las playas de arena blanca, puedes añadir otras actividades : senderismo, visitas a los motu, los pequeños islotes típicos de la isla, tumbarse al sol, paseos nocturnos a la luz de la luna, balnearios, almuerzos gourmet, cruceros… Incluso los visitantes más preparados quedarán atónitos ante la belleza de la famosa Perla del Pacífico, la isla única e impresionante del Pacífico Sur. La isla de Bora Bora está formada por tres municipios: Anau, Faanui y Vaitape. Vaitape, la “capital”, es un destino que podrás conocer dando un breve paseo por las playas públicas de Bora Bora si buscas recuerdos típicos, como perlas de Tahiti, joyas de conchas, pareos, artesanía de madera, aceites y jabones perfumados.
Lo que hace única a Bora Bora
Située dans les Islas de la Sociedad, de la Polinesia Francesa, la exclusividad y la naturaleza acuática de Bora Bora hacen de esta isla tropical un paraíso de ensueño. He aquí cómo llegar a la isla. A la Perla del Pacífico llegan líneas aéreas nacionales con vuelos regulares desde Papeete o Moorea (50 minutos) y desde Huahine y Raiatea (20 minutos). Una vez allí, tendrás donde elegir: hoteles de gama básica, media y alta, estancias de lujo en villas privadas, resorts, bungalows sobre pilotes para tu luna de miel… En todos los casos, los visitantes de Bora Bora disfrutarán de una tranquilidad sin igual durante su viaje. Cierra los ojos y relájate entre lagunas, sin molestias. ¡Tus noches serán deliciosas!
La aventura también forma parte de la experiencia de Bora Bora. La singular geografía de la isla invita a los visitantes a participar en experiencias únicas, como submarinismo, exploración de arrecifes, safaris, senderismo, pesca e incluso paracaidismo ascensional. Estas experiencias permiten explorar algunas de las lagunas más bellas de las Islas de la Sociedad, ver cientos de especies marinas diferentes, como mantarrayas, y empaparse del paisaje desde la tumbona de tu hotel o tu bungalow sobre pilotes… Tras el esfuerzo, disfruta de un spa y masajes en tu hotel.
Bora Bora, un paraíso romántico
La isla de Bora Bora es un paraíso para los enamorados y el destino ideal para una luna de miel, al igual que París. Quizás se deba a la emblemática belleza del monte Otemanu, que emerge del mar como una joya esmeralda, rodeado de magníficos arrecifes de coral y varios islotes de arena blanca conocidos como motu… Los legendarios bungalows sobre pilotes de Bora Bora se extienden por todos los motu y a menudo ofrecen vistas ilimitadas del monte Otemanu.
Desde Bora Bora, podrás visitar Tupai, a unos veinte kilómetros al norte de Bora Bora, famosa por su parecido con un corazón. En Tupai no hay habitantes ni balnearios, por lo que tu estancia en esta isla de ensueño se limitará a una visita de un día. Lo mejor es llegar en helicóptero o catamarán.
Tatuajes, arte y danza en Bora Bora
Los turistas que visiten Las Islas de Tahiti aprenderán rápidamente que la lengua tahitiana y las experiencias que se pueden vivir en la Polinesia Francesa están relacionadas con la artesanía, la danza y los tatuajes polinesios. Éstas cuentan la historia de los antepasados de la población local. La cultura polinesia fue reprimida durante décadas, casi hasta el punto de desaparecer. Hoy ha vuelto, ¡más viva y vibrante que nunca! Muchos visitantes comparten la misma opinión: los tatuajes polinesios son los más bellos del mundo.
La palabra tatau (tatuaje) tiene su origen en Las Islas de Tahiti. Cada tatuaje tiene un significado que cuenta la historia personal y ancestral de cada tahitiano. Este aspecto de la vida tahitiana, asociado a orquestas que utilizan instrumentos de percusión como el to’ere, el fa’alete y el pahu, así como guitarras y ukeleles, se introdujo en Bora Bora y ha contribuido a conformar la cultura y la danza de Las Islas de Tahiti. Acontecimientos anuales como el Heiva i Bora Bora dan testimonio del valor que se concede a los tatuajes, la danza y el arte.
Flores de tiara y bungalows sobre el agua
Bora Bora, una de las 118 islas de la Polinesia Francesa, es famosa por la belleza de sus paisajes y la riqueza de su cultura tahitiana. Los habitantes de la isla reciben a los visitantes con aromáticos collares de tiaras, cálidas sonrisas y música y danzas tradicionales. La esencia de Bora Bora cautiva a todos los que la visitan. ¡El recuerdo de su estancia es tan vívido como un sueño!
La isla fue uno de los primeros lugares del mundo donde se podían encontrar bungalows sobre el agua. Estos bungalows vieron la luz por primera vez en Las Islas de Tahiti en 1967, y ahora su popularidad se ha extendido por todo el mundo. El lugar perfecto para una historia de amor: el bungalow sobre el agua ofrece acceso directo a la laguna desde tu terraza privada, donde podrás despertarte por la mañana… y contemplar el amanecer sobre el monte Otemanu desde tu cama. En algunos bungalows, ¡incluso podrás ver bancos de peces nadando a través de una ventana de cristal en el suelo!
El poder del maná en Bora Bora
Durante tu viaje a Bora Bora, experimentarás una sensación única. Este sentimiento, llamado Mana, es la fuerza espiritual en el sistema de creencias polinesio. El maná es un concepto difícil de describir, aunque se puede sentir y experimentar profundamente en todas las islas de Tahiti. El maná es un misterio omnipresente que vincula a todos los seres vivos y a los que les precedieron. Puede canalizarse para aumentar la fuerza, la sabiduría o la paz, y abarca las dualidades de la vida.
Para experimentar el maná, los visitantes de Bora Bora deben dejarse llevar y sumergirse por completo en todo lo que ofrece la Polinesia Francesa. Participar en la cultura bailando, cantando y explorando. Pasar momentos tranquilos disfrutando de la naturaleza de la isla y encontrarse con animales salvajes como rayas y tortugas marinas son también formas estupendas de experimentar el abrazo del maná.
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