La Reserva de la Biosfera de Fakarava es una de las joyas vírgenes de la Polinesia Francesa. Desde 2009, este espectacular atolón y las pocas islas vecinas que lo rodean han sido designados Reserva de la Biosfera, lo que convierte a esta región en un verdadero tesoro natural. Con algunos de los arrecifes de coral más ricos y mejor conservados del mundo, Fakarava es un paraíso para los amantes de la naturaleza y los entusiastas del submarinismo.

Esta reserva de la biosfera, que abarca todo el atolón de Fakarava y varios atolones circundantes, alberga una increíble diversidad de especies marinas. Más de 1000 especies de peces, rayas y tiburones tienen aquí su hogar, lo que lo convierte en un auténtico santuario submarino. Entre ellas hay especies animales raras, como la tortuga carey, la paloma polinesia y el cangrejo cocotero.

Fakarava: una joya virgen en la Polinesia Francesa

La creación de la Reserva de la Biosfera de Fakarava es testimonio del compromiso de la comuna y de Francia con la preservación del medio ambiente y el desarrollo sostenible. Este estatus lo concede la UNESCO en el marco del Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB). Su objetivo es conciliar la conservación de la biodiversidad, el desarrollo económico y el bienestar de las poblaciones locales.

Este atolón, junto con las islas circundantes de Kauehi y Niau, forma un ecosistema único que es un verdadero tesoro para la fauna y la flora marinas. ¡La riqueza de la naturaleza es muy importante para los polinesios! Honrar las plantas, el agua, la tierra y los animales está arraigado en sus valores y tradiciones desde hace siglos. La gestión de esta reserva de la biosfera ejemplar es un modelo para la conservación de las regiones insulares costeras tropicales. Fakarava ha conseguido mantener la integridad de su frágil ecosistema al tiempo que permite a los visitantes disfrutar de sus maravillas naturales.

Explorando la belleza natural de Fakarava

No faltan actividades en la Reserva de la Biosfera de Fakarava. ¡Seguro que hay una para ti! El submarinismo es sin duda uno de los atractivos estrella de la región. Los arrecifes de coral y la rica y colorida vida marina ofrecen experiencias de buceo como no encontrarás en ningún otro lugar del mundo. Los buceadores tienen la oportunidad de nadar entre más de mil especies de peces multicolores, observar majestuosas tortugas e incluso avistar varias especies de tiburones.

Une baignade dans le lagon de Fakarava ©_Grégoire Le Bacon
Une baignade dans le lagon de Fakarava ©_Grégoire Le Bacon

Además de bucear, nuestros compañeros de viaje pueden disfrutar de la belleza del atolón de Fakarava explorando sus paisajes verdes y azules u observando las ballenas jorobadas en temporada. Las lagunas cristalinas, las playas de arena blanca y los cocoteros son perfectos para románticos paseos de luna de miel o para momentos de relajación e ilustración cultural con un guía local, porque al fin y al cabo, ¡en eso consisten las vacaciones en Las Islas de Tahiti!

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